El camino del guerrero nos muestra una historia donde el
yo interior, es lo único necesario para la vida de Dan Millman, quien nos
enseña a que la vida es algo más que el orgullo y la satisfacción del ego;
donde la ambición de todos nos lleva a nuestra misma desconfianza y por ello a
dudar de nuestras capacidades, sin darnos cuenta que lo que verdaderamente
importa es lo que podemos hacer con lo que sabemos y no la capacidad de saber
todo lo que queremos, porque no todo lo que sabemos se atribuye a la realidad, porque mucho de lo que
percibimos es solo interpretado por nuestra intuición.
Dan nos muestra que su felicidad se lograra con grandes
sacrificios, que él considera necesarios en su vida; esos que creemos “sacrificios”
solo son un vacío de la imagen que nos vende el mercado y la política,
haciéndonos necesarias las cosas que los enriquecen. Esto es lo que todos
creemos, creemos en la idea que nos venden, creyendo que así alcanzaremos la
satisfacción de lo que creemos son nuestras
necesidades, rompiendo con la ética y las humanidades, adquiriendo las cosas
acosta de los demás. Lo que estamos segados a ver es que pasando por encima de
los demás solo lograremos sentirnos más vacíos y unitarios pensando que no
necesitamos de los demás cuando solo lo que puedes llegar a tener son cosas
materiales que solo te brindan un momento de satisfacción.
Lo que nos enseña Sócrates en el camino del guerrero es
que cada acción tiene su consecuencia y su placer, pero nunca se obtendrá solo
el placer y la felicidad eterna, solo hay que saber manejar lo urgente y lo
importante. Siempre estamos al pendiente de lo que pueda que piensen los demás
lo que nos lleva a esconder nuestro verdadero yo y maquillar nuestra apariencia
y nuestras actitudes frente a cualquier cuestionamiento, entonces esta misma
vulnerabilidad es la que hace que los demás pacen por encimas de la metas o
sueños que queremos alcanzar haciendo que la opinión de los demás le gane a la
defensa de nuestras ideas, opacando nuestras capacidad de tomar decisiones por
si solos; lo que hace que todos vallamos por un solo objetivo y nos obliguemos
a querer lo que los demás; sin cuestionar nuestros gustos.
Muchas veces creemos que tenemos una vida satisfactoria y
completa, pero lo que en realidad vivimos es una soberbia, ego y orgullo de
nuestras mismas ambiciones, de lo que queremos llegar a ser; también queremos
ser imitadores de lo que pensamos tiene éxito y felicidad sin darnos cuenta de
que los momentos de felicidad se encuentran individualizados en cada persona.
Esto nos lleva a presentarnos como falsos y ajenos a nosotros mismos frente a
los demás creando la misma envidia frente a nuestros cercanos porque pensamos
que la imagen que muestra cada uno es verdadera y facilita que la satisfacción
de otro afecte nuestro momento de felicidad. Creyendo que todo lo sabemos y
todo lo conocemos.
Solo somos marionetas manejadas entre nosotros mismos,
porque nos dejamos llevar de las que pensamos son necesidades que solo hacen
más vacíos a nuestra capacidad de entendimiento y de trato humano, llegamos al
punto de no tener control de nuestros propios actos. Nos dejamos afectar de
nuestras apariencias y así mismo seguimos una sola idea y aparentar sujetos
totalmente distintos a los que verdaderamente solos somos.
El sentirnos superiores a los demás, hace que tengamos
problemas entre la sociedad,
generando desigualdad y conflicto
entre todos; considerando que obtendremos felicidad consiguiendo lo material y la imagen de lo perfecto.
Nosotros mismos generamos un círculo vicioso donde lo
material llena el vacío de la necesidad de interacción de un ser a otro,
dejando que la tecnología dominen nuestros pensamientos, creándonos una auto
dependencia donde nuestros mismos
sentimientos y valores toman un segundo lugar y el hombre sea dominado
por su baja autoestima.
En la actualidad los medios tecnológicos han invadido el hogar donde las personas más
indefensas y vulnerables son arrastradas por el círculo social, cometiendo
acciones que no se deberían generar por la misma falta de razonamiento y de la
difícil toma de decisiones frente a los problemas de la sociedad. Esto es
generado por que el hombre quiere alcanzar o estar más cerca de la verdad.
El hombre necesita de un camino espiritual para actuar como ser moral, y seguir una idea
o imagen de la perfección con el fin de
alcanzar la felicidad basándose en una
guía donde la prioridad son los demás y no uno mismo. Dando campo a los que
solo buscan el bien propio aprovechándose de la guía espiritual que siguen los
demás.
El hombre toma
diversos caminos espirituales con el fin
de llegar a una perfección. Donde solo cabe el bien propio
y familiar, el ser humano
ya no busca el bien del otro si no
subestimar su ser para sentirse superior.
Con el fin de tomar el liderato de un grupo de individuos con baja estima ante
una sociedad que lo rechaza por no
compartir un pensamiento moral.
El hombre siente una absoluta presión por alcanzar la
felicidad ya que así se cree que se tendrá
una vida plena , dando se pasó a la sima pasando por encima de sí mismo
y de otros seres por miedo a que alguien interrelación en tan anhelada búsqueda y
lo lleve al fracaso.
El hombre como ente moral se proyecta en la perfección
rodeado de aquellos seres que puedan admirar su éxito, donde no son riesgo de superar lo ya alcanzado .creando el miedo a la
soledad.
Se cree que el hombre solitario fracasa en su camino
espiritual, donde es rechazado por una sociedad moralista que lo obliga a
unirse a ella o permanecer en el fracaso.
Creando así un círculo vicioso llamado sociedad .
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